Las organizaciones de la red dedicaron una jornada a plantar 300 nalcas en el predio de recolección de la Agrupación de recolectores de Pehuén, aprendiendo de sus experiencias y de los saberes acumulados por generaciones que se viven de los bienes comunes de los bosques.
La actividad es la cuarta realizada desde la constitución de esta instancia que reúne a recolectores y recolectoras, representantes de la pesca artesanal, de la Mesa lafkenche; con el apoyo de servicios públicos como la Municipalidad de Lebu, Servicio País, y el acompañamiento de investigadores e investigadoras de la Universidad de Concepción, en el marco del proyecto Anillo “Laboratorios de codiseño para el cambio climático, gobernanza y cuidado de comunes en zonas costeras en el centro sur de Chile”.
El proyecto es financiado por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo – ANID, y ejecutado por la Universidad de Concepción, la Universidad Católica del Maule y la Universidad de Los Lagos, en el secano costero Maulino, Lebu y San Juan de la Costa, se encuentra en su primer año de ejecución.
Durante los encuentros anteriores intercambiaron experiencias en las costas donde se practica la recolección de orilla, en los cuales conversaron sobre historia local, sus capacidades organizativas y la evolución de los procesos de extracción de los productos marinos. También tuvieron un taller junto a funcionarios del Servicio Nacional de Pesca y autoridades de la Capitanía de Puerto de Lebu para despejar dudas sobre sus atribuciones y funcionamiento.
Paola Díaz, presidenta de la agrupación de recolectores de Playa Quiapo, donde se realizó la actividad pasada, se expresó conforme a poder compartir experiencias con organizaciones hermanas. “Fue bueno porque se dio a conocer el tema del coto, que en Minacosta no lo venden y nosotros si lo vendemos, ellos lo ven como plaga pero nosotros le sacamos valor, teniendo diferentes funciones para diferentes lugares”.
Las conversaciones dieron paso a avances en cuanto al cuidado de las zonas de extracción, como actividades conjuntas de extracción y limpieza, levantando los primeros ejercicios de gobernanza para estos ecosistemas marinos.
Por su parte Alex Moraga, de la Agrupación Nalqueros de Pehuén, se mostró entusiasmado por encontrarse con personas que también se preocupan de la naturaleza y con quienes compartir las experiencias de recolección y reforestación. “Uno es recolector de una zona más de montaña, como se dice, entonces intercambiar culturas con quienes son de la orilla del mar fue muy interesante, ya que ellos aprendieron de uno y nosotros de ellos”.
Las actividades de la red continuarán durante este año, siendo la siguiente un taller sobre los Espacio Costero Marino para los Pueblos Originarios (ECMPO).
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