Pedro Barrueto, nuestro colaborador en temas de la ciencia y la tecnologia, quien muchas veces nos ha adelantado importantes temas científicos esta vez nos escribe sobre el concepto "Capacidad de Carga" (CC) que en nuestro país, ciudades y campos, es aun no bien conocido y en las Universidades, mal explicado.
La capacidad de carga, CC, es un concepto familiar para todos nosotros, sabemos que los camiones, tienen una capacidad limitada de carga, los buses y los barcos también, un teatro lo mismo.
¿Y nuestro planeta, que es un vehículo espacial que viaja por el universo, también tiene CC?, por supuesto que sí. Pero se refiere a población de seres humano que puede soportar respecto a su alimentación.
Conforme las noticias leídas en la prensa e internet, la población seres humanos de nuestro planeta en 1900 era de un billón de habitantes, pero, en el 2000, o sea, en 100 años después, la población fue de 7 billones de almas o bocas que alimentar.
En 2050, se espera que la población de nuestro planeta sea de 9 a 10 billones, conforme las mayores o menores barreras que imponga la “selección natural” de Darwin. Foto 1
La CC de un ecosistema o hábitat natural, conforme los biólogos de poblaciones, es el “tamaño máximo de una población que puede soportar un dado ambiente natural, sin entrar en colapso”.
En el caso de nuestro planeta, ese tamaño límite estaría estimado son 10 billones de personas.
Pasado este valor (10 billones) nuestro planeta entraría en colapso, faltarían de forma generalizada, alimentos, maderas, agua, viviendas, transporte, empleos, energía, etc., todo eso, agravando las ya limitaciones que existen hoy. Foto 2 y Foto 3.
Para ilustrar más al lector, coloquemos el caso de aumento explosivo de la población de conejos y liebres en una región de Chile, por disminución de sus enemigos naturales, ejemplo: zorros o, por leyes ambientales proteccionistas.
Sería un impacto negativo para la vegetación natural y biodiversidad, pues, afectaría a la agricultura y pecuaria directamente e, indirectamente a la producción de alimentos.
Porque, estos animalitos comerían todo, primero lo más abundante después lo más escaso y finalmente hasta las raíces de las plantas restantes.
Coloquemos otro ejemplo, este proveniente del mundo de los insectos, especialmente ahora, que está toda esa imprevisibilidad ambiental por el cambio climático.
Supongamos un aumento explosivo del tamaño de la población de la “polilla del pino” (Rhyacionia buoliana), que justamente encuentra en el pino su hábitat natural, atacando los brotes verdes y jóvenes de este árbol.
Dejaría la escoba a nivel de plantaciones, producción de celulosa, construcción civil, y mercado laboral.
Esto mismo podría acontecer con el “gorgojo del eucalipto” (Gonipterus scutellatus), atacando plantaciones de este árbol en diversos locales o hábitat, tanto de pequeños, como, de grande propietarios.
En la literatura mundial, se cita a la Isla de Pascua como descalabro ecológico, pues allí no mucho tiempo atrás en el tiempo, siglo 17, la población humana prácticamente desapareció.
El exceso de población para una isla de pequeño porte, y el aislamiento continental, provocó una devastación, pues, no solo acabaron con el bosque, sino que fueron incapaces de renovarlo.
Dentro de este escenario, el suelo empobreció, la construcción de barcos paró y la pesca, como única fuente de proteína animal, cesó.
Además sin árboles, no había combustible para hacer fuego ni maderas para la construcción de casas y aldeas, sumase a eso, las constantes guerras tribales por espacio y alimentos.
En otras palabras la CC de ese hábitat o ecosistema, no pudo soportar el aumento de población de pascuenses o polinésica, pues, no ofrecía condiciones mínimas de sobrevivencia, no solo para el hombre, sino que, también para otros componentes del ecosistema.
Ecosistema aquí, es entendido como un hábitat natural, donde las diferentes especies de plantas y animales conviven armónicamente.
En el norte de Chile, el clima árido, los suelos pobres y la falta de agua, crean condiciones desfavorables para cualquier población de seres vivos, por lo tanto la CC de esos hábitats es casi nula. Sin embargo son ricos en energía solar. Foto 4.
Por otro lado, los surtos ocasionales de “marea roja” en el sur de chile, por aumento transitorio de los factores abióticos (nutrientes, temperatura, etc.) en el litoral, afecta negativamente a la CC de muchas poblaciones marinas tales como la de los marisco y por tanto, a la pesca artesanal. Foto 5.
Entendido el concepto de Capacidad de Carga (carring capacity en inglés), coloquemos el problema en términos de crecimiento sustentable
El crecimiento es un imperativo de un país y de la economía. El problema, es que también hay que distribuir para que la riqueza no se concentre en pocas manos y la felicidad alcance para todos aquí en la tierra y no privilegio de algunos pocos.
Imaginemos la consecuencia de un crecimiento exponencial de la población de un país.
Santiago por ejemplo, ya se está tornando insoportable con tanta concentración de gente: transito demorado, servicios públicos lentos y burocratizados, alta demanda de alimentos, falta de empleos, poca estabilidad laboral, delincuencia, segregación de barrios, polución ambiental, altas tasas de depresión y ansiedad, hospitales repletos, y así siendo, el tamaño de la ciudad no puede ser ilimitado. Foto 6.
Sin duda que el exceso de población presiona los ecosistemas naturales por más agricultura, más forestas, más explotación marina, minera y transporte. Pero no solo eso.
También hay urgencia de innovaciones tecnológicas para dar respuesta a los problemas nacionales.
Es aquí donde la economía de un país muchas veces se tranca, porque no genera esas innovaciones, y la deuda pública del país aumenta.
Y entonces, uno se podría preguntar cual deberá ser el tamaño de la población de la provincia de Arauco, o sea CC, para que sus comunas puedan prosperar en término de calidad de vida, sin riesgo de agotar sus recursos naturales ejemplo: agua, suelo, pesca, bosque, flora y fauna silvestre.
Alguien sabe?
Ya sabemos que la emigración histórica campo/ ciudad, desde las altas cumbre de la cordillera de Nahuelbuta hacia ciudades enclavadas en los valles, Cañete, Contulmo, Tirúa, etc., durante buena parte del siglo 20, aumentó la densidad poblacional de estas comunas sin la correspondiente contrapartidas de trabajos de calidad.
Una consecuencia de eso, ha sido el intenso comercio ambulante o informal, con el agravante que, a veces eso, es puro contrabando y lo que es peor, no es trabajo estable y carente de previsión social.
Irónicamente, las encuestas del INE, Instituto Nacional de Estadística, y algunos economistas, han llamado eso de emprendimiento y lo contabilizan como aumento de empleo.
En otros tiempos, la izquierda y la CUT hubieran llamado eso de farsa.
Y por mencionar la CUT, acontece que nuestra agremiación histórica, está convertida en una olla de grillos: la acusan de poca transparencia y de ser poco democrática en su gestión. Lo que es una pena, porque pierde seriedad.
Pero, el medio ambiente y ecosistemas, no apenas tienen que resistir la presión de un exceso de población, sino de tremendos “accidentes” ambientales, como fueron los incendios forestales en esta temporada de verano, los cuales, tuvieron un feroz impacto en la biodiversidad, población civil y pecuaria.
Curiosamente, todavía, el gobierno y el organismo competentes del estado, no han resuelto la autoría, frente a una opinión publica desorientada y confusa a este respecto.
Las redes sociales han clamado por más transparencia y más verdad, respecto, a si estos incendios fueron “inocentes accidentes” o, actos deliberados y dolosos.
Los incendios de 15 camiones el domingo 12/03/17 en Temuco, parece sugerir que hay una cultura impune de hacer incendios y sabotajes, por parte de ciertos sectores del país, subestimando el estado de derecho en Chile.
Sea como fuera, los contribuyentes van pagar el pato por esas 500 mil hectáreas de bosques arrasados, porque ese dinero gastado en la recuperación de esos daños, no va ir para a incrementar la infraestructura del país, por ejemplo: mejorar la calidad de los hospitales, escuelas y laboratorios de investigación y salas de aulas de universidades públicas.
Digo universidades públicas y no privadas, porque ARCIS, por ejemplo, es una cosa dramática.
Muchos creen que el desarrollo y crecimiento de un país es un problema de medidas económicas: cobrar más impuestos aquí, dar más subsidio allá, otorgar un bono compensatorio por este otro lado, etc.
No, no es bien así, porque no se puede desacoplar la economía al medio ambiente, especialmente en un país como el nuestro, que vive de materias primas y no de exportar inteligencia (tecnologías).
Infelizmente nuestra economía, es intensiva en demanda de recursos naturales (litio, cobre, pescaos, alimentos, madera, frutas, etc.) y son ellos y el mercado internacional, los que en último término, van dictar esa pujanza económica, para sustentar esa población.
Por otro lado, la extracción y uso de esos recursos naturales y producción de alimentos, requiere de tecnologías e innovación para ser competitivo en el mercado interno y externo, ahora más que nunca, porque estamos globalizados y desesperados por vender más frutas y harina de pescado a nuestros hermanos chinos y asiáticos.
No se hasta que punto Codelco, se ha preocupado de mejorar la mano de obra, a través de un vigoroso programa de capacitación de post graduación e innovación en la minería chilena, financiando proyectos de investigación en las universidades nacionales.
Tal vez no, porque allí predomina la visión de economicistas, administradores de empresa y políticos desempleados.
Por otro lado, los salarios de esa alta administración, bien como, los de otras estatales, son un “espectáculo de categoría mundial” en relación al salario mínimo o ético.
Recordemos que en el campo internacional, los países del primer mundo, crearon después de la segunda guerra mundial, la famosa “Revolución Verde”, y en la década del 60 más exactamente, se conocieron sus resultados más relevantes.
Estos resultados en los países del primer y tercer mundo, produjeron enormes avances en el mejoramiento genético de las semillas, la fertilización de los suelos, uso de defensivos agrícolas , bien como, mecanización del campo y capacitación profesional promoviéndose la formación de doctores, (Ph.D.), y especialistas en las diferentes áreas de investigación.
Si vamos más lejos en el tiempo, allá en el Neolítico, 10 mil años, atrás, la respuesta del aumento de la población fue el nacimiento de la agricultura, el hombre pasó de cazador y recolector a plantador y cosechador de alimentos.
Pues entonces, ese desafío del aumento de la población de un organismo vivo en su hábitat, incluido el hombre, produce impactos no fáciles de contornar cuando la capacidad de carga (aumento desmedido del tamaño de una población) supera lo que un ecosistema puede proporcionar.
Entre estos impactos, están, la desertificación, agotamiento de las fuentes de agua, polución ambiental, desempleo, falta de cohesión social, populismo, (soluciones fáciles e inmediatistas).
Sin embargo, el hombre dispone de la ciencia y la tecnología, para enfrentar estos problemas para ecuacionar mejor el factor social, ecológico y económico, resaltando que, ninguna de estas variables puede ser sacrificada en favor de las otras, eso se llama Crecimiento Sostenible y es más compatible con la CC de nuestro planeta. Foto 7.
Mas, en Chile la investigación, la innovación, la eficiencia del estado, la productividad y seriedad son todavía dimensiones subestimadas por nuestra sociedad y el concepto de Capacidad de Carga en nuestro país, ciudades y campos, es aun no bien conocido y en las Universidades, mal explicado.
En este sentido Neruda tiene razón, cuando dice que Chile es la patria de los cántaros, o sea, nuestra tecnología criolla e innovativa original, se quedó atrasada en el tiempo.
Me detengo en el concepto seriedad, nos falta seriedad, no es posible que existe un organismo colegiado del estado, llamado nada menos que Consejo de Defensa del Estado.
En este Consejo, ilustres funcionarios, pueden tener un salario mensual de 8 millones de peso por 48 horas de trabajo a la semana y pasmen, hasta los 75 años de edad.
Indicados a dedos por los presidentes de la republica (Caso Bachelet/Javiera Blanco (DC) hay poco que hacer, apenas denunciar.
Esto es claramente un despilfarro y mal uso del dinero público, como el caso de Gendarmería, Carabineros, Milicogate y las millonarias asesorías de Enrique Correa (PS) denunciadas con indignación, por la prensa nacional y redes sociales.
Parece que todo esto, formara parte del triste legado que nos dejará Michell, como si esto fuera poco, también hay una tal Jacqueline, atrapada en las redes de las pesqueras y en la mira de la justicia, por financiamiento irregular de campañas políticas conforme, divulgado por la mídia.
A pesar de todo este panorama dramático, aprovecho esta oportunidad para desearle a mis lectores que 2017, les traiga alegrías, voluntad de reír y paz, en la esperanza que habrán días mejores, por ejemplo, con más seriedad, responsabilidad y meritocracia en la administración de nuestro país, tal como años atrás, lo soñaron intelectuales y profesores como: Andrés Bello, Ignacio Domeyko, Valentín Letelier, etc., ex rectores de la U. de Chile.
En Chile no nacen los dioses, Chile es la patria de los cántaros.
(Eulogio Suárez: “Neruda Total”. Stgo. Chile, Ed. Pfeiffer Ltda. 2012).