El 11 de noviembre de 1983, SEBASTIÁN ACEVEDO, se inmola frente a la Catedral de Concepción, en un acto desesperado por denunciar la detención de sus hijos por agentes del régimen de Pinochet. La fotografía de su cuerpo en llamas apareció en las portadas de los periódicos del mundo. Sus hijos, desde el dolor, le sobrevivieron.
Un año más tarde, en el mismo lugar, se reunió una multitud para honrar su memoria y denunciar el régimen de oprobio que nos sometía. Allí son detenidos una veintena de manifestantes, de los cuales, ocho fueron relegados a distintos puntos del norte del país.
Militantes cristianos de izquierda fundan el movimiento contra la tortura Sebastián Acevedo.
Aquí, un extracto de algo que escribí ...
III. EN MEMORIA (noviembre de 1983)
A Sebastián Acevedo
El amor es una pira
una antorcha que ilumina
el rostro de la Catedral y de los transeúntes
para extinguirse agónico
en la pileta de la Plaza de Armas
¡ Mis hijos, quiero a mis hijos !
gritó antes del fuego abrasador
(el silencio no hizo promesas)
una mariposa herida se posa
sobre una flor marchita
El amor es una pira
fotografiada para el mundo
es una tea encendida
es el fuego del amor
¡Están en las mazmorras!
¡Devuélvanme a mis hijos!
(el silencio conminó con voz de trueno
con voz de oficial de turno
amenazó con muerte con tortura)
un cuervo observa desde el campanario
El amor es el fuego
que devela que revela que denuncia
el amor es una antorcha que ilumina
el amor es una luz para el amor
¡Les están matando en el tormento!
¿Dónde están mis hijos?
¡Que el mundo sepa que se llevaron a mis hijos!
...
(el silencio intenta su jugada
rompe el anillo
frágil anillo dibujado en el cemento
frágil cerco que defiende al amor)
...
las alas de una mariposa
son arrastradas por el viento
El amor es una luz que estalla
iluminando el cielo
faz de Dios absorta
luz que ciega el espanto
luz del amor
que abre los ojos al amor
el cerillo encendido inicia la labor
es el fuego inicial del horror
(el silencio observa
con su mueca indiferente
prepara respuestas y coartadas
cocina subterfugios )
un cuervo alza el vuelo
para posarse entre los árboles
El amor es piel carbonizada
es dolor herida llaga muerte
es luz que se extingue
vida que se apaga por amor
el cemento guarda sólo la huella del incendio
el mundo se asombra con gráficas de espanto
dos hijos nacen desde el fondo del dolor
*** SIN COMENTARIOS INGRESADOS***