Y al igual que Inglaterra se prepara para conmemorar su título obtenido en el año 1966. Un joven alameño que viajó desde Los Álamos, Chile a Europa, también se prepara para conmemorar los 50 años de su viaje de fantasía hacia Europa, Reino Unido – Inglaterra – Londres – con dirección al Estadio Wembley durante todo el periodo que duró el mundial de 1966Rolando Matus nos cuenta su historia.

Allí, aparte de disfrutar de nueve partidos del mundial, anduvo por históricos y extravagantes lugares que se pueda imaginar un alameño. Por ejemplo, Escocia, Stratford (casa de William Shakespeare), Sunderland, Paris, Madrid, Rio de Janeiro, Montevideo, Santiago. Un verdadero “viaje de Ensueño”, -como fuera relatado por su hijo Patricio Antonio en el cuento de su blog “Cuentos y Cosas”.

Esta es su historia. Cuando tenía 7 años, como muchos niños, le gustaba jugar después de asistir a clases en una canchita provisoria llamada “cancha de los trunes”, ubicada a un par de cuadras de su casa. Allí se iba con sus amigos del barrio todas las tardes, se congregaban hasta llegar la noche.

Ya más grande, quiso pertenecer al club deportivo “Huracán” de su pueblo y se inscribió para vestir esa camiseta donde también jugaron sus familiares.

Su participación en el fútbol fue muy activa. Incluso salió campeón en una oportunidad. Estaba instruido de todo, ya sean medios informativos, tabla de jugadores, equipos técnicos, estadios y todo cuanto tuviese relación. Fue un activo jugador hasta cuando le dio el tiempo y los años.

A sus 7 años dio el puntapié inicial a su trayectoria como conocedor de futbol, sin ser el jugador que le habría gustados ser, pero eso, no le opacó ser un niño feliz. Y de la mano del tiempo fue desarrollando sus gustos por el deporte en general, ajedrez, ping-pong, ciclismo, siendo el fútbol su preferido.

Cuando se desarrolló el mundial de fútbol en Inglaterra-1966, Rolando cursaba 4º humanidades, con 17 años en el Liceo de Hombres de Lebu (Hoy, Isidora Ramos). Los partidos del fútbol profesional se escuchaban por la radio, y los medios escritos deportivos llegaban una vez a la semana en una librería de Lebu (Olave) donde él acudía para ver ansioso la abertura de los fardos de revistas. Así fue como verificó por sus propios ojos lo que un día de mayo había recibido la noticia a través de un telegrama que personalmente el jefe de correos de ese entonces Osvaldo Viveros le llevara a su domicilio. (hoy vive en Quilpué). -

Cuando el Sr. Viveros frenético por la noticia corrió por la avenida Los Álamos (hoy Ignacio Carrera Pinto) en dirección a la casa del ganador a fin de ser el primero en ver la expresión de Rolando, éste no fue lo efusivo que debió, debido a que dudaba de la veracidad de la noticia… más bien pensaba que se trataba de una broma. Y así se quedó aquel día, intranquilo esperando el lunes o martes o jueves, ir a, la librería y ver algún artículo que dijese alguna cosa que confirmara la noticia.

Estaba seguro que, si era verdad, lo sabría a través de la revista por la cual había participado llenando cupones con los ganadores de la previa al mundial.

Y era verdad, efectivamente salió la información en la revista Gol y Gol de la editorial Zig-zag.

Esta parte de su vida, ha sido una verdadera historia que debe quedar plasmada en los libros con historia de Los Álamos, debido a lo inusual para cualquier persona, sobre todo si ésta es de un pueblo minoritario en todo sentido. Tomando en consideración el tiempo en que vivimos, y el tiempo pasaba lentamente, no era fácil salir del pueblo hacia el pueblo vecino. Tampoco lo era a nivel provincial, menos regional y ni pensarlo a nivel país.

Por lo que,… a nivel de continente…y, Europeo… era inimaginable… solo en un sueño podía ser.

Un sueño limitado, porque cuando no tienes ocasión de ver una televisión que te muestre lo que existe a nivel mundial, ni siquiera lo tienes en tu retina como para llevarlo a nivel mental. Por lo que aún la imaginación de esos tiempos también era limitada.

Hoy si no viajas, la televisión te trae el mundo a tu alcance. Hoy cualquiera dice. Yo estuve en tal parte. En ese entonces, era como si dijésemos…joven alameño viaja a la Luna. Como lo dijo una colega cuando vio la información con fotografía incluida en la revista “Rincón Juvenil”… ella dijo; ….” mmm, eso fue como viajar a la luna…”.

La hermosa experiencia comienza, cuando le van a notificar a su casa con un papel telegráfico en el cual decía que era ganador de un viaje al mundial de Inglaterra, que comenzaría en julio de ese año -1966.-

Como es de imaginar, la noticia fue dramáticamente inverosímil para aquel joven de tan solo 17 años llamado, Rolando Matus López, quien estaba anonadado con tal notición. Su corazón palpitaba aceleradamente, lo que supo dominar muy bien, porque en su sencillez, se limitó a leer en silencio, luego miraba a su interlocutor, quien chispeante de alegría lo abrazaba y decía… ¡felicitaciones Rolando¡…¡ mira qué premio te has ganado ! .. y como…”.

Las preguntas y respuestas afloraban con fuerza y ansiedad. El momento de euforia recién comenzaba, incluso para el telegrafista Osvaldo Viveros, quien no se contenía de pura alegría, porque él también le regalaba los cupones que Rolando jugaba con tanta pasión e ilusión.

Con la timidez de joven adolescente, no demostraba tal euforia. Le costaba convencerse y asimilar la noticia así es que, no le quedó otra cosa que esperar a que pasaran los días, para verificar por sus propios ojos la veracidad del documento entregado por el Jefe de Correos. Eso debía ocurrir en la librería de Lebu cuando llegaba el fardo con las revistas, diarios y periódicos a través del ferrocarril.. Hay que remontarse al tiempo del tren en que todo era más lento, el tiempo de espera era mucho mayor pero, era lo que había, y como seres de costumbres sabíamos esperar.

Una vez que la librería recibía los paquetes era una verdadera ceremonia. La abertura era metódica y en ese rato los coleccionistas se juntaban para no quedar sin su ejemplar. Rolando en una esquina, esperaba a tener la revista en la mano para tener la certeza en algún medio informativo, un diario o la misma revista que supuestamente lo habría premiado como decía aquel telegrama.

Temeroso y reservado esperaba pacientemente su turno. ¿Sería verdad?… será cierto que fue el ganador del premio para ir al “Mundial de futbol en Inglaterra”? silencioso esperaba, sin comentar a nadie. A medida que se acercaba a alguna revista, su corazón palpitaba más fuerte… será tanta maravilla posible?…esa y muchas preguntas se le sumaban a la ansiedad mientras llegaba la hora de la verdad.

Y era verdad.

Porque en tanto tuvo en sus manos la Revista “Gol y Gol” de la empresa editora Zig Zag… la abre temblando y lo primero que ve… un gran título en la primera página.

De Los Álamos a Londres ROLANDO MATUS LOPEZ VENCEDOR DEL CONCURSO

Corría por su cuerpo, un turbulento torrente de agua fría que lo hacía tiritar sin poder controlarlo. ¿Qué dirán mis compañeros cuando sepan?… mis profesores… lo sabrán…? Cómo se los digo…? Las preguntas se alborotaban en su mente de niño aún. Le costaba manejar tal situación.

Al día siguiente llegando a la sala de clases del Liceo de Lebu, un estruendo lleno sus oídos, la euforia de sus compañeros se hizo sentir con un emotivo aplauso que lleno cada rincón de la sala. No cabía de gozo, estaba pleno compartiendo con sus compañeros del día a día, todas las emociones que uno se pueda imaginar.

El venía con la sola idea de pasar desapercibido, tenía la seguridad de que era algo que sólo él sabía, mas cuando llega a la sala, se encuentra con que las paredes tenían pegada la información que él había descubierto el día anterior. Eso por supuesto que lo sorprendió, pues no imaginaba que la noticia ya era conocida.

En conversaciones con sus amigos de Los Álamos relataba así sus vivencias… “ …

“Mis compañeros eufóricos, entre gritos y aplausos hicieron que mi aparición en la sala fuera… una entrada triunfal inolvidable.

Las paredes estaban empapeladas con la gran noticia…mis compañeros gritando felices… se abalanzaron al mismo tiempo, para abrazarme. Comenzaba una aventura sin comparación y mi mayor felicidad de estudiante, de juventud y por el tiempo que venga… son vivencias que perdurarán siempre en mi corazón.

La prensa informaba… “Joven de Los Álamos a Inglaterra…”…como ven… ¡fui famoso! Recorrimos, Londres Madrid, Paris fueron. Un mes de estadía fue el colosal premio que recibí… para no creerlo, sin embargo, ocurrió una vez.

Hoy eso… es algo impensado ¡un mes en Inglaterra para dos personas!… parece un sueño. La persona elegida para acompañarme en ese sueño cumplido fue mi tía Erundina López Cartes (Este año 2016 cumple 101 años).

Mi madre… a quien perdí cuando tenía 12 años…me acompañó desde arriba, ella siempre estuvo conmigo en ese y otros momentos.

Un rey, eso fui por un tiempo, así me sentía recibiendo todos los honores a cada paso, realmente fui tratado como tal.

Santiago fue mi primera escala… Allí me recibieron con “honores”, cuando llegué a la revista Gol y Gol, –por un día- era muy temprano y andaba solo, las primeras personas de Santiago que me recibieron fueron los aseadores, auxiliares y mensajeros.

¿Posteriormente, se me acercaron otras personas y preguntaron… Ud. es el ganador del concurso?… Sí, yo soy ¡… conteste algo turbado y sorprendido de que en Santiago, o mejor dicho en la Editora Zigzag, me conocieran y tuviesen algún interés, fue una verdadera sorpresa.

Luego, se me acerca un caballero alto y me dice; tú eres Rolando Matus… y estirando su mano dice- yo soy el director de la revista, ven conmigo. Me llevó a su oficina, me presentó a sus colaboradores.

Tomaron fotografías y me llevaron a recorrer las dependencias de la prestigiosa revista. Me llevaron al Estadio Nacional, a los diarios, a la radio Chilena, paseos por el museo, Canal 13 con Hernán Solís, Autódromo “Las Vizcachas”, Cerro San Cristóbal y así sucesivamente.

Antes de empezar con los recorridos mencionados, es decir, cuando llegué a la editorial por la mañana, yo pensaba que eso sería todo, y luego regresaría a casa, o sea, a Los Álamos, sin embargo, tal fue el revuelo que provocaba mi presencia, que decidieron tenerme durante una semana en Santiago

Le dije al director… “…vine solo por el día… así es que traje ropa para el viaje nada mas…” Ah, no importa ¡aquí te compraremos lo que sea necesario para una grata permanencia en Santiago -me contestó-. Así fue como me hice de algunas exclusivas prendas en un local de ropa en calle San Diego donde me presentaron al Sr Solari dueño de la tienda hoy un apellido vinculado a “Grandes Tiendas Falabella”.

Luego de una semana completa de actividades y sorpresas… donde también me presentaron al Presidente de la República don Eduardo Frei Montalva en una actividad que realizaba en el cerro San Cristóbal. Me llevaron al Canal 13 y me entrevisto Hernán Solís, la TV no llegaba a nuestra provincia. En la noche en el programa de Hernán Pereira el “Malón de la Chilena” aprovechando la entrevista en directo envié un saludo a mi familia y avisarle que no regresaría hasta el fin de semana próximo.

6balonEn los días siguientes visite casas deportivas especialmente la de “Leonel Sánchez” y me regalaban zapatos de Futbol y equipamiento para la práctica del futbol y un balón de futbol para el “Huracán de Los Álamos”.

Como buen cristiano fuimos a la catedral frente a la plaza me arrodillé frente al altar y agradecí a Dios por lo que estaba viviendo.

Cada lugar que iba conociendo era sorprendente, algunas las conocía por fotografía en revistas de la época, pero estaba ahí en “vivo y en directo”. Me llevaron al autódromo “Las Vizcachas” y ver carreras de autos, debía pellizcarme a cada rato para darme cuenta que no era un sueño.

La Línea Aérea de España “Iberia” que me trasladaría a England me ofreció una cena en un exclusivo restaurante “Sancho Panza” del barrio alto, en ese tiempo Providencia.

Me llevaron al Aeropuerto Cerrillos de donde iniciaría el viaje hacia Europa, subir y conocer la moderna aeronave en el que viajaría, todo era sorprendente.

Mientras tanto me hospedaba en un lujoso Hotel “Emperador” ubicado en plena Avenida Alameda, atendido a cuerpo de rey. Inolvidable!!!

Se jugaba un cuadrangular de futbol con clubes de Italia, Inglaterra y México como preparación del seleccionado chileno, me llevaron a conocer el Estadio Nacional me hicieron ingresar al centro de la cancha y por los parlantes anunciaban que yo era el flamante ganador de la Revista Gol y Gol. Escuché aplausos y me fotografiaban, un jugador me hizo un pase con el balón y se lo devolví sin problemas, solo faltó que me pasaran una camiseta. Primera vez que veía futbol profesional desde la tribuna principal donde se ubican los periodistas deportivos. Volvía a pellizcarme.

Regresé a Los Álamos lleno de regalos y a mi Liceo a contar lo que estaba viviendo y conociendo, era inimaginable. Mi emoción en esos días era tremenda. Mi semana en Santiago había sido gratísima, las muestras de cariño me hacían olvidar los años difíciles que había tenido con el fallecimiento de mi madre a tan corta edad.

Iniciamos los preparativos con la persona elegida para emprender esta aventura, en este caso la tía “Eru”, tramitar el pasaporte, y dejar pasar los días, semanas para preparar las maletas e iniciar este viaje de ensueño el 9 de Julio de ese año 1966.

Fui objeto de varias despedidas, mis compañeros de curso del Liceo en Lebu, con el rector de ese entonces a la cabeza y demás directivos y profesores con fotografía incluida que fue publicada después por la revista Gol y Gol.

En Los Álamos el Club de Leones hacia lo mismo con una cena en un restaurante de esta localidad, la iglesia católica hacia lo mismo e instituciones en la que participaba la tía Eru.

Hasta que llegó el día del viaje, primero a Santiago, un grupo de vecinas adornaron un arco de ramas a lo ancho de la calle deseándonos un buen viaje, Don Sócrates Benítez manejaba el bus que nos llevó a Concepción hasta la plaza España, frente a la antigua Estación de Ferrocarriles.

Aquí tomamos un bus de la empresa LIT para llegar a Santiago y nos esperaban los ejecutivos de la “Editorial Zig-zag” y “Gol y Gol” y conocer a mi acompañante, nos instalaron en el Hotel “Emperador” y cuatro días después nos embarcábamos en el avión de Líneas Aéreas de España (Iberia) un día sábado a las 14.30 horas aproximadamente.

Nuestra primera escala fue en Buenos Aires, posteriormente Montevideo para llegar a Rio de Janeiro. Aquí estuvimos unas dos horas, el avión cargó combustible e iniciar la travesía del Océano Atlántico para entrar a Europa por España. Aterrizamos en Madrid alrededor de las 8 de la mañana, aquí cambiamos de avión y un par de horas después aterrizábamos en Londres cerca del mediodía.

El destino nos tenía preparado otra sorpresa, el año anterior, un tío nuestro, hermano de la tía Eru se había radicado por tres años en Londres becado ´por la Universidad de Concepción. La revista lo había contactado y estaba él su esposa y sus 3 hijos esperándonos en el aeropuerto, fue un encuentro maravilloso. Cuando íbamos a pensar que nos juntaríamos tan lejos de nuestra tierra que nos vio nacer, por supuesto que el tío José Antonio López Cartes, Ingeniero Químico y Metalúrgico es alameño y quiere mucho a su tierra donde tiene muchos familiares.

Cuando arribamos en Londres, llevábamos un sentimiento especial porque allá nos esperaba un hermano de mi Tía Erundina, el tío José Antonio López Cartes, Ingeniero metalúrgico que estaba becado por la Universidad de Concepción durante tres años en Inglaterra y… nos tocó justo ese año. Algo divino estaba ocurriendo…

La varita de la felicidad nos tocaba por todos lados. Así se iniciaba nuestra aventura por el viejo continente.

Nos ubicaron en el Hotel Sn Ermin’s, lujoso total en pleno centro de la capital inglesa, nuestro tío nos invita a conocer su domicilio, allí conocí el Underground (tren bajo tierra) en nuestro país aun no comenzaba a construirse el Metro.

Al día siguiente en un moderno y lujoso Auto-pullman nos fuimos al norte de Inglaterra para llegar a la ciudad de Newcastle y hospedarnos en el “Royal Turks Head Hotel” de una arquitectura y decoración impresionante.

De aquí nos trasladaban a ver los partidos en el grupo que le correspondió a Chile. El primer encuentro que presenciamos en el estadio de Middlesborough fue Rusia-Corea del Norte. Y al día siguiente en modernos buses llegamos a Sunderland donde Chile debutaba ante Italia. (Perdimos 2-0).

Disfrutar del paisaje, la infraestructura, la carretera, la caballerosidad de los ingleses era estar en otro mundo, nos llevaban 20 años de diferencia a lo menos, era impresionante.

Un día sábado nos avisan que al día siguiente iremos a conocer Escocia, la ciudad de Edimburgo y la región de los Lagos. Aquí conocimos un par de Castillos Medievales, un puente colgante el más grande del mundo de ese entonces, hasta llegar a Edimburgo, visitamos un tremendo castillo en la parte alta de la ciudad una antigua fortaleza construida sobre una roca de origen volcánico durante el siglo XII, y es una de las atracciones turísticas más visitada de Escocia. Vimos a los escoceses usar falda, toda una novedad para nosotros.

Desde Newcastle ciudad ubicada al Noreste de Inglaterra en un entorno espectacular a orillas del rio Tyne. Su nombre del Keep Castle, castillo construido por los normandos en el año 1080.

Desde acá nos trasladábamos a ver los encuentros de Chile. Ese año a Chile le fue muy mal, quedamos eliminados en la fase grupal , perdimos con Italia 2-0 Empatamos con Korea del Norte 1-1 y terminamos perdiendo con Rusia 2-1. Finalmente clasificaron Rusia y Korea del Norte.

Nuestra selección regresó a Chile y nosotros continuamos con el itinerario que contemplaba este viaje de película.

Dejamos la ciudad de Newcastle y emprendimos nuestro viaje de regreso a Londres pasando por Manchester, Liverpool y detenernos en Stratford y visitar el Museo del conocido dramaturgo, poeta y actor inglés William Shakespeare autor de obras como Otelo, Hamlet y la conocida obra Romeo y Julieta.

Una de las visitas imperdibles fue el palacio de Buckingham y los honores a la reina del cambio de guardia, el Big Ben, Palacio de Westminster, el Zoológico de Londres llamado London Zoo, es uno del parque zoológico científico más antiguo del mundo (1828). Continuamos nuestro viaje pasando por Oxford para llegar a Londres y reencontrarnos con nuestra familia López Villagrán.

Mi tía Eru, decidió quedarse en casa de su hermano hasta el final del viaje. Me quedé solo en el Hotel disfrutando de las atenciones en tan maravilloso lugar.

A los siguientes encuentros, me acompañaron al estadio Wembley a ver los cuartos, octavos y final de la copa del Mundo, la tía María (Q.E.P.D) mamá de mis primos Cesar, Alejandro y Enrique.

A la final Alemania – Inglaterra, me acompañó, mi tío José Antonio. La final que ganó Inglaterra fue un partido muy especial. Primera vez en la historia de los mundiales, que ésta se definía en tiempo de alargue, quince minutos más por lado. Aquí Inglaterra superó a Alemania por 4 goles a 2 con un gol muy polémico, un balón que pegó en el travesaño y cayó justo en la línea no ingresando al arco, el árbitro validó como gol y se desató la polémica. Para mi Alemania había jugado mejor. Se terminaba la “Copa del Mundo Jules Rimet versión England 1966 y para nosotros, “23 días de estadía en ese maravilloso país”.

Visitamos uno de los Museos de Ciencia donde existen documentos y objetos de la historia de Londres desde la prehistoria hasta el día de hoy. Otro lugar histórico e interesante fue la visita a la famosa Torre de Londres, oficialmente el Palacio real y Fortaleza de su Majestad, es un castillo histórico situado en la ribera norte del rio Támesis en el centro de la ciudad.

Y, cómo es de imaginar, los percances no podían faltar, claro está que, como novato, eso tenía que ocurrir. Por ejemplo, cuando íbamos hacia Londres, llegamos al aeropuerto de Rio de Janeiro la espera es inevitable y yo, impaciente por empezar las aventuras, quería acortar la espera. Estaba muy nervioso, me fui al baño y me puse a leer una revista. Me concentré en la lectura y no me di cuenta como pasaba el tiempo. Miro el reloj y me asusté, salí rápidamente, seguí por los pasillos hasta llegar a la terraza donde había quedado la tía Eru, me doy cuenta que el avión estaba a punto de partir, a lo lejos divisé el abrigo rojo de mi tía, que iba subiendo las escaleras del avión y… ya estaban cerradas las rejas del aeropuerto…entonces que me quedaba?.. que hacía?, corrí por aquí, corrí por allá, miraba desesperado por donde pasar, no había persona que me pudiera ayudar… entonces en la desesperación… retrocedí, tome impulso y salte una reja… corrí como un loco y…jadeando llegué, cuando las escaleras estaban a punto de subirlas. ¿Llegué al lado de tía Eru, me dice… dónde estabas?… pensé que te habías subido primero…y me encontré sola acá arriba decía ya calmada al verme…, mientras que yo aún estaba sujetando mi corazón…”

Son varias las anécdotas que sucedieron en este viaje, será tema de un próximo escrito con más detalles que en su momento tendrán en sus manos.

Muchos años después (2006) su hijo menor Patricio escribiría un cuento que tituló “Un viaje de Ensueño”, He aquí su relato con una frase genial al término de su escrito.

“En un pequeño pueblo, un joven niño vivía junto a sus tías, ya que hace algunos años atrás su madre falleció por causa de una enfermedad. Este joven de 17 años, que adoraba el football, compraba todas las semanas una revista de football, la cual leía con mucho entusiasmo.

Una vez, este joven llamado Orlando Matheus, leyendo y leyendo esta revista encontró un concurso en el cual se podía ganar un pasaje con acompañante al país donde se iba a realizar el mundial de ese año en Europa. Con gran afán, Orlando participó en este concurso con la esperanza de ganar y poder ir, junto con su tía, a Inglaterra.

Pasando los días, Orlando estaba cada vez más impaciente y no encontraba la hora para conocer los resultados. En uno de esos días en que nada pasa, en el telégrafo de esa época estaba llegando un mensaje.

El primo de Orlando que trabajaba en el correo del pueblo, estaba recibiendo un mensaje. Después de leerlo, sorprendido salió corriendo con destino a … la casa de Orlando. Cuando llegó con el mensaje en la mano, entro a la casa y se lo entrego. Orlando al leerlo, no podía creer lo que sus ojos veían, lo leyó una y otra vez hasta que se convenció.

Estaba muy sorprendido y no sabía que decir, ni que hacer, estaba realmente feliz. Luego de saber tan fantástica noticia, fue donde su tía y le dijo que había ganado el premio al que había concursado y ahora podrá viajar a Inglaterra con ella y encontrarse con su hermano en Londres.

Los días siguientes fueron muy largos, y en el colegio todos le preguntaban cosas como –“cuanto estarás allí?” ; “me traes un recuerdo?” ; “como te ganaste el premio?”.

Por fin pasaron los días, y ahora él debía tomar el tren para llegar a la capital lo antes posible, este viaje duró algunos días, y cuando llegaron, Orlando y su tía se dirigieron al aeropuerto, tomaron el avión y se encaminaron con destino a Europa. Luego de cruzar el Océano y hacer algunas escalas, llegaron a Londres y se instalaron en un hotel de lujo.

Al llegar al hotel en el cual debían pasar las próximas tres semanas, dejaron sus maletas y el resto del día pasaron recorriendo las calles de la hermosa ciudad, comprando cosas y viendo las tiendas y visitando a su tío que estaba becado en una universidad londinense.

Orlando y su tía, todos los días Iban a ver los partidos a los distintos estadios, pasaron los días y el mundial se fue acabando, pero ellos estaban felices de pasar tan bella experiencia.

Y llego el día en que Orlando debía volver, así que se dirigieron al aeropuerto, él y su tía se subieron al avión, luego de esperar un momento, el avión emprendió su vuelo de regreso, y Orlando vio cómo se alejaba la ciudad de Londres, con un poco de pena pero a la vez con alegría, pena por dejar tan bella ciudad y no saber si alguna vez volvería a estar allí, pero con mucha alegría por haber estado horas viendo los partidos de sus equipos favoritos y haber estado junto con sus estrellas del football.

Al llegar, después de un largo viaje a su querido país, y a su casa, supo que ese viaje a Inglaterra le había cambiado la vida para siempre vivió un viaje de ensueño.

Luego estuvo los siguientes días contándoles a sus amigos tan bella experiencia que pasó durante tres semanas en el extranjero.

Es posible que su madre lo premio desde el cielo porque era un buen niño.”.-

Y llegó el día del regreso a Chile. Era el primer día de agosto, aún quedaba algo importante que conocer, esta vez tomamos un avión Air France y llegamos a Paris cerca de la media noche y el viaje continuaba al día siguiente a Chile a las 18 horas, por lo tanto, tuvimos que alojarnos en un Hotel más sencillo los costos corrían por cuenta nuestra, nos levantamos temprano y salir a tomar aire parisino, tomar desayuno en una terraza con una espectacular vista de Paris. Tomamos un taxi para ir a las oficinas de Iberia para confirmar nuestro vuelo a Santiago. Aprovechamos de recorrer en otro taxi los lugares más atractivos y conocidos de esa “ciudad de la luz” como la “Torre Eiffel”, la “Catedral de Notre Dame”, la “Avenida de los Campos Elíseos”, el “Arco de Triunfo”, el “Museo de Louvre” y por supuesto el “Rio Sena”.

En la tarde tomábamos el Avión que nos traería de vuelta a nuestro país, pasando por Madrid en una escala de un par de horas, atravesar el Atlántico y llegar a Santiago antes del mediodía.

Aquí nuevamente me esperaban los ejecutivos de la revista para trasladarnos al hotel Emperador donde pasaríamos los últimos dos días antes de regresar a nuestro terruño.

La llegada a Los Álamos y posteriormente a Lebu donde estudiaba le significó varias invitaciones a contar su historia de este “Sueño Maravilloso”

Hoy Rolando, se encuentra haciendo uso de su descanso después de 48 años de trabajo en diferentes actividades que realizó con muchísimo agrado y reconocimiento, siendo su última actividad de treinta años en la Corporación Nacional Forestal.

Inglaterra conmemorará el 50 aniversario de su título en Mundial 1966. La Federación Inglesa de Futbol está anunciando de los eventos que llevara a cabo para conmemorar el 50 aniversario de la victoria de la selección de Inglaterra en la Copa del Mundo de 1966. Los Ingleses conquistaron su primer y único Mundial hace medio siglo, después de derrotar en el estadio Wembley a Alemania Federal por 4 goles a 2, goles anotados por Geoff Hurst en tres oportunidades y el otro de Martin Peters.